miércoles, 24 de abril de 2013


Yo no creo que el amor muera. 

Yo no creo que el amor muera. Cuando es sólo enamoramiento se pasa la memoria
como jugando a contar cuentos, cuando el enamorado cree que será el único
objeto amado. Pero si el centro afectivo giró toda una época gris y a veces amarilla
en torno a un mismo cuerpo, a una misma manera de ser así, es imposible que
desaparezca la presencia de un amor que fue como movimiento de alas, arriba para
ver el mundo como lo único que roba la felicidad al feliz. Tanto amor queda en las
cicatrices que el alma va tomando un color negro de boca cerrada, y no hay
manera de escaparse de la muerte.

Cómo olvidar el combate de las pieles en veranos claros y oscuros inviernos?

No me busques a través de otra forma porque sólo así, cansado y repelente, serio
y morados los ojos como las uvas que nunca comimos juntos pero que fueron
completamente consumidas, sólo así habrá en tu espíritu el camino que buscaste
como un animalito de carne.
Darío Lemos

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